Ingenieros de SpaceX ya están trabajando en el órgano que regula el espacio aéreo de Estados Unidos

Malaska, Kiernan, Smeal y Glantz no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios. La FAA tampoco respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.
En su post sobre X, Duffy escribió: «Como sé que los medios de comunicación (y Hillary Clinton) afirmarán que el equipo de Elon está teniendo un acceso especial, permítanme aclarar que la @FAANews ofrece regularmente visitas guiadas al centro de mando tanto a los medios de comunicación como a las empresas».
Sin embargo, el miércoles, el administrador en funciones de la FAA, Chris Rocheleau, escribió en un correo electrónico dirigido al personal de la FAA al que WIRED tuvo acceso que DOGE y los equipos de empleados especiales del gobierno desplegados en las agencias federales eran «prioritarios», antes de señalar que la agencia había «dado la bienvenida recientemente» a un equipo de empleados especiales del gobierno que ya habían recorrido algunas instalaciones de la FAA. «Les pedimos ayuda para encontrar soluciones mientras mantenemos el espacio aéreo abierto y seguro», escribió, añadiendo que los nuevos empleados ya habían visitado el Centro de Mando de la FAA y Potomac TRACON, una instalación que controla el espacio aéreo y proporciona servicios de control del tráfico aéreo a los aeropuertos de DC, Maryland y Virginia.
Una incursión más de DOGE
En una reunión plenaria del Departamento de Transportes celebrada a finales de la semana pasada, Duffy respondió a una pregunta sobre el papel de DOGE (el Departamento de Eficiencia Gubernamental de Elon Musk) en asuntos relacionados con el espacio aéreo nacional. Sin mencionar explícitamente a los nuevos empleados, sugirió que se necesitaba ayuda para reformar las alertas NOTAM (Notice to Air Mission), un sistema crítico que distribuye datos y avisos en tiempo real a los pilotos pero que ha sufrido importantes interrupciones, una de ellas este mismo mes. «Si puedo obtener ideas de ingenieros realmente inteligentes sobre cómo podemos arreglarlo, voy a tomar esas ideas», dijo, según una grabación de la reunión revisada por WIRED. «Buenos ingenieros» también podrían trabajar en cuestiones de espacio aéreo, dijo.
SpaceX funcionó como base de operaciones previa a la inauguración para el equipo de DOGE, según un informe de The New York Times y fuentes que hablaron con WIRED. En los meses comprendidos entre el 5 de noviembre y el 20 de enero, miembros de DOGE como Steve Davis (presidente de la Boring Company de Musk) y el joven ingeniero Luke Farritor operaban desde la oficina de la empresa en Washington DC, según una fuente con conocimiento de la situación.
La compañía no respondió a preguntas sobre si estos empleados mantendrán sus salarios y puestos en la empresa durante su tiempo en DOGE. Muchos de los supuestos operativos del departamento se han incorporado como «empleados especiales del gobierno», que están limitados a trabajar 130 días al año. La semana pasada , WIRED informó de que Tom Krause, un operativo del DOGE en el Departamento del Tesoro, seguiría manteniendo su puesto como consejero delegado de Cloud Software Group a la vez que desempeñaba las funciones de subsecretario fiscal. Otros miembros de las empresas de Musk, incluidas xAI y Tesla, también han asumido cargos en el DOGE.
A finales de la semana pasada, la administración Trump despidió a 400 trabajadores de la FAA, según su sindicato, el Professional Aviation Safety Specialists. El sindicato dice que estos incluían empleados en período de prueba que trabajaban en comunicaciones de control de tráfico aéreo y sistemas de radio e informática relacionados. Los controladores aéreos no se vieron afectados por los despidos, dijo Duffy en un post en X.
Apenas dos semanas antes, EE UU sufrió su incidente aéreo más mortífero en más de una década, cuando 67 personas murieron después de que un helicóptero del Ejército colisionara con un avión de pasajeros en Washington DC. Aunque los resultados iniciales sugieren que el complejo equipo y los problemas de comunicaciones posiblemente desempeñaron un papel en el desastre, el presidente Trump se apresuró a culpar a las políticas de diversidad e inclusión que, hasta hace poco, eran parte de la filosofía gubernamental de Estados Unidos. Trump arremetió contra este programa de una década, que ayudaba a la FAA a identificar el talento entre las poblaciones con discapacidad. Las personas con discapacidad contratadas en la FAA y otras agencias federales a menudo son aceptadas bajo la autoridad de la Lista A, exactamente la ruta que los nuevos ingenieros de Musk han tomado en la agencia.
Los intereses de SpaceX están peligrosamente cerca de la FAA
La FAA se ha enredado frecuentemente con SpaceX de Musk, ya que la compañía de cohetes y otras luchan por operar sus propios intereses en el abarrotado espacio aéreo estadounidense. En enero, la FAA suspendió temporalmente el programa de SpaceX después de que uno de sus cohetes Starship se rompiera en pleno vuelo, causando daños a la propiedad pública en Turcas y Caicos, en el Caribe. La FAA desvió decenas de vuelos de aerolíneas comerciales tras la explosión y anunció una investigación sobre el incidente, que está en curso y está siendo dirigida por SpaceX. Musk, sin embargo, calificó el fallo de «apenas un bache en el camino» y no pareció indicar que la investigación fuera a ralentizar la cadencia de lanzamientos de SpaceX. El año pasado, la compañía indicó que aspiraba a realizar 25 lanzamientos de la Starship en 2025.
El portavoz de la FAA, Steven Kulm, dijo a WIRED que «la FAA está supervisando la investigación del percance dirigida por SpaceX». La FAA no respondió a más preguntas sobre si la presencia de ingenieros de SpaceX en la agencia constituiría un conflicto de intereses.
En septiembre, la FAA propuso 633,000 dólares en multas tras dos incidentes ocurridos en 2023 en los que SpaceX supuestamente no siguió los requisitos de su licencia, violando la normativa. En respuesta a una publicación de un usuario de X sobre las sanciones, Musk escribió: «¡El problema fundamental es que la humanidad estará confinada para siempre en la Tierra a menos que haya una reforma radical en la FAA!». Poco después, Musk exigió la renuncia del jefe de la FAA, Mike Whitaker. En enero, más de tres años antes de que finalizara su mandato, Whitaker dimitió.
“Le dije a Elon que no puede tener nada que ver con ningún conflicto”, dijo el presidente Trump en una conferencia de prensa esta semana, en respuesta a una pregunta sobre Musk, SpaceX, la FAA y los conflictos de intereses. “Así que no permitiremos que Elon tenga nada que ver con el espacio”. La Casa Blanca no respondió inmediatamente a una petición de comentarios.
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