Cómo usan los policías exactamente las huellas digitales para resolver crímenes

Desde una botella hasta una pila de papeles, pasando por la propia arma que se utilizó para cometer un delito. En la escena de un crimen, las famosas huellas digitales, o dactilares, que sirven para identificar a una persona, al presunto autor, pueden encontrarse en muchos objetos. Pero, ¿qué son exactamente, cómo las detecta la policía científica y cuánto tiempo pueden durar en una superficie antes de desaparecer?

¿Qué son las huellas digitales?

Esencialmente, las huellas digitales son los rastros dejados por los surcos, los dermatoglifos, es decir, el conjunto de crestas y valles de la piel, presentes en las yemas de los dedos de las manos, que se utilizan como medio de reconocimiento e identificación personal.

Las huellas digitales son inmutables, es decir, el patrón de líneas tiende a no cambiar a lo largo de la vida, y son únicas para cada individuo, aunque hay que señalar que esto nunca se ha demostrado científicamente, sino solo con datos empíricos. Concretamente, lo que produce las huellas digitales, es decir, lo que se deposita en las superficies tocadas por los dedos, es nuestro sudor, que está compuesto por un 98% de agua, un 1% de componentes orgánicos y un 1% de sales inorgánicas y es secretado por las glándulas de las puntas de los dedos.

Muestras de huellas digitales.

Ilustración: MirageC; Getty Images

«El depósito se presenta en forma de contornos (crestas) que son la imagen de los diseños de las crestas en la piel de los dedos. Los patrones formados por las huellas digitales se dividen en tres categorías distintas, llamadas en inglés: arches, loops y whorls«, explica la Universidad de Génova.

Las huellas digitales también se caracterizan por minucias, determinadas por bifurcaciones y terminaciones, que son «muy importantes para la discriminación de huellas digitales y, por lo tanto, se utilizan en la mayoría de los sistemas de comparación automática».

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¿Cómo se detecta una huella dactilar?

Durante una investigación, la policía científica puede encontrarse con tres tipos diferentes de huellas digitales:

• Visibles, debidas al contacto de manos sucias sobre superficies limpias o viceversa.
• Moldeadas, debidas al contacto de las manos con sustancias maleables, como cera o pegamento.
• Latentes, huellas invisibles, producidas por una sustancia liberada por los poros de la piel y compuesta por agua, material sebáceo, ácidos, calcio y fosfatos.

Las visibles y moldeadas pueden fotografiarse fácilmente y compararse con las disponibles en el archivo. Las más complejas de analizar son las latentes. Para detectarlas, hay que crear un contraste entre las líneas digitales y la superficie.