La sextorsión infantil es el nuevo negocio de la mafia asiática que usa esclavos para crímenes digitales

En la última década, bandas de delincuencia organizada que operan en el Sudeste Asiático han estafado miles de millones de dólares. Con gigantescos complejos, donde los expertos estiman que unas 200,000 víctimas de la trata de personas se han visto obligadas a realizar estafas las 24 horas del día, las empresas criminales utilizan una serie de fraudes relacionados con romance, inversiones en criptomoneda y suplantación de identidad para timar a miles de personas en todo el mundo. Ahora, nuevas investigaciones revelan que los centros de estafas pueden tener un trasfondo aún más oscuro.

Cerca de 500 denuncias de extorsión sexual de menores presentadas durante un periodo de dos años al Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados (NCMEC), una organización estadounidense para la seguridad de la infancia, están relacionadas con redes de estafa que operan en el sudeste asiático, según un nuevo estudio compartido en exclusiva con WIRED por la organización contra la esclavitud International Justice Mission (IJM). Otros 18,000 informes sobre explotación infantil enviados al NCMEC también contienen direcciones IP utilizadas por dispositivos situados en lugares donde se sabe que se cometen estafas.

Según Eric Heintz, analista global de IJM especializado en la lucha contra las estafas forzadas y parte del equipo responsable del estudio, al menos 40 de los 44 centros de estafa previamente identificados en Camboya, Myanmar y Laos pueden relacionarse con las denuncias de sextorsión infantil. Heintz afirma que se trata de la «primera prueba clara» de que las operaciones de estafa forzada están «probablemente» relacionadas con casos globales de extorsión sexual infantil: «Fue sorprendente lo extendido que estaba», y añade que los datos más amplios también indicaban la ubicación de sitios fraudulentos conocidos.

La sextorsión se ha vuelto popular

Los hallazgos que vinculan directamente las redes de estafa con las denuncias de explotación sexual de niños y jóvenes se producen en un momento en que los casos de sextorsión se han disparado en los últimos años. En la sextorsión, los delincuentes suelen engañar a las personas para que compartan imágenes de contenido sexual explícito, que luego utilizan para chantajearlas y obligarlas a pagar. Aunque todos los casos de sextorsión pueden ser devastadores, los delincuentes se han centrado cada vez más en los menores, y docenas de adolescentes se han quitado la vida a consecuencia de ello. Muchos casos están relacionados con estafadores nigerianos de Yahoo Boy y otros estafadores de África Occidental.

La nueva investigación del IJM, financiada por el grupo de seguridad infantil Safe Online y el Instituto de Impacto Social de Thomson Reuters, examinó los datos de más de 1.1 millones de incidentes de «incitación en línea», incluidas 3.1 millones de direcciones IP, que las empresas tecnológicas comunicaron al NCMEC entre enero de 2022 y agosto de 2024. Las compañías y los proveedores de servicios electrónicos de Estados Unidos están obligados a notificar los incidentes de explotación infantil en línea a la CyberTipline del NCMEC.

Los datos se cruzaron con las direcciones IP que se sabe que se utilizan en la ubicación de 27 complejos de estafas en Camboya, 16 en Myanmar y uno en Laos. En total, 18,017 de las denuncias de explotación infantil enviadas al NCMEC contenían direcciones IP utilizadas en los sitios criminales. Para establecer un vínculo más sólido entre los posibles casos de sextorsión y los centros de estafa, los investigadores del IJM también obtuvieron datos de publicidad en teléfonos móviles de intermediarios de datos y los compararon con los datos del NCMEC. Tomando todos sus análisis en conjunto, el IJM concluyó que al menos 493 de las denuncias hechas al NCMEC están «probablemente» conectadas directamente con lugares de estafa forzada.

«Hay limitaciones en lo que podemos ver con estos datos, pero lo que tenemos hasta ahora es exacto. En todo caso, creo que se está subestimando la magnitud del problema», refiere Heintz. Los datos obtenidos por los investigadores son solo una instantánea de algunas presuntas actividades de sextorsión vinculadas a centros de estafa. Por ejemplo, los datos del sector de la publicidad móvil son incompletos, los datos del NCMEC no contienen todos los posibles casos de sextorsión denunciados y las empresas tecnológicas que comunican datos al NCMEC probablemente se inclinan por empresas estadounidenses.

Qué dice el informe de International Justice Mission

En su informe, el IJM señala múltiples denuncias de centros de estafa vinculados a una mayor extorsión sexual contra adultos. El informe no descarta que los delitos de sextorsión se dirijan deliberadamente a los niños, pero señala que estos también pueden quedar atrapados en estafas dirigidas a adultos si utilizan los dispositivos de sus padres u otros cuidadores. Ahora que esta investigación ha demostrado la existencia de un vínculo, los investigadores subrayan que es necesario seguir investigando para que las autoridades comprendan mejor la conexión entre la sextorsión infantil y los centros de estafa, y determinar si los menores son el objetivo específico. El NCMEC no respondió inmediatamente a la solicitud de comentarios de WIRED.

A menudo dirigidos por grupos del crimen organizado chino, los complejos de estafa se han intensificado en todo el sudeste asiático desde aproximadamente 2019. Los delincuentes trafican con miles de personas de más de 70 países, los mantienen cautivos en recintos, les retiran sus pasaportes y los obligan a estafar a la gente en línea. Si se niegan, pueden ser golpeados y maltratados. Inicialmente dirigidos a personas de habla china, los centros de estafa han desplegado las llamadas estafas de ‘pig butchering’ (carnicería de cerdos), junto con otras diversas formas de estafas de inversión y románticas. Gracias a los ingentes flujos de dinero ilícito, los delincuentes han abierto cada vez más centros en Oriente Próximo, África Occidental, Latinoamérica y Europa Oriental; dirigiendo las estafas contra personas de todo el mundo; y modificando las formas de estafar a la gente.