El FBI identifica a joven de 22 años de Utah como sospechoso en la muerte de Charlie Kirk

En un comunicado, la Universidad Estatal de Utah confirmó que Robinson asistió brevemente a la escuela durante un semestre en 2021. Los investigadores recuperaron un rifle de caza Mauser del calibre .30 cerca del lugar del tiroteo, supuestamente abandonado por el pistolero cuando huía hacia una zona boscosa. Se encontró un cartucho vacío en la recámara y tres cartuchos con carga en el cargador. Cox argumentó que los casquillos llevaban inscripciones grabadas. Según los informes, incluían memes con chistes groseros, como: «Si lees esto, eres gay. LMAO».

Detalles del ataque contra Kirk

Las autoridades afirman que el tirador disparó desde una azotea que daba a un patio donde Kirk celebraba uno de sus característicos debates universitarios. Imágenes ampliamente compartidas en internet muestran a Kirk respondiendo a una pregunta sobre los tiroteos masivos cuando una bala lo alcanza de repente en el cuello.

Se calcula que asistieron unas 3,000 personas. Millones más se vieron confrontados con las horripilantes imágenes del incidente en internet, que en algunos casos se reprodujeron automáticamente en las principales plataformas, como TikTok, Instagram y X, donde, según los investigadores, han disminuido los esfuerzos por combatir la difusión de contenidos violentos.

La investigación se desarrolló en un momento en el que el FBI ya estaba en la mira. En las últimas semanas, la oficina ha sufrido despidos masivos de agentes de alto y medio nivel, medidas que, según una demanda presentada esta semana, tienen motivaciones políticas. Se dice que las reorganizaciones han minado la moral y los conocimientos institucionales, indicando a los agentes que desafiar las directrices políticas podría costarles la carrera.

Los días posteriores al tiroteo estuvieron marcados por la confusión. En cuestión de horas, funcionarios estatales y federales emitieron versiones contradictorias sobre si se había detenido a alguien. Patel, del FBI, anunció brevemente que había un «sujeto» detenido, para anunciar después que la persona había sido puesta en libertad. Las ruedas de prensa interrumpidas y las sesiones informativas desiguales alimentaron aún más la incertidumbre, y las especulaciones desenfrenadas en los informativos de televisión y las redes sociales se apresuraron a llenar los vacíos de información creíble.

Personas influyentes de extrema derecha y grupos extremistas publicaron los datos personales de personas a las que acusaban de celebrar la muerte de Kirk, lo que desencadenó campañas de acoso y amenazas de muerte. Pocas horas después del tiroteo, un sitio web empezó a recopilar nombres, cuentas de redes sociales y empleadores de los acusados.

El ambiente se enrareció aún más el jueves 11 de septiembre, cuando la sede del Comité Nacional Demócrata en Washington, DC, fue bloqueada brevemente por una amenaza de bomba, que la Policía del Capitolio consideró posteriormente no creíble. Más de una docena de universidades históricamente negras recibieron amenazas falsas que obligaron a cerrar y cancelar las clases en varios campus.

Patel defendió la investigación del FBI durante la rueda de prensa, afirmando que las autoridades tardaron «menos de 36 horas, 33 horas, de hecho» en detener a Robinson: «Esto es lo que pasa cuando dejas que los buenos policías sean policías».

Las comunicaciones del FBI revisadas por WIRED muestran que los agentes habían señalado previamente los sucesos de Kirk como posibles focos de tensión. En un correo electrónico de abril de 2021, obtenido por primera vez por la organización sin fines de lucro Property of the People a través de una solicitud de registros públicos, aparece un miembro de un grupo de inteligencia del FBI con sede en Seattle alertando a otros agentes sobre las apariciones de Kirk en el estado de Washington. Los actos figuran entre otros señalados por tener el potencial de «conducir a la violencia política».

Artículo publicado originalmente en WIRED. Adaptado por Alondra Flores.