Código Futuro: La IA es el nuevo diseñador de armas biológicas, y Sora el caos del copyright

¡Hola, amigos de Código Futuro! Saludos desde la redacción de WIRED en Español.
Esta semana, la IA ha pasado de ser una herramienta de productividad a ser un actor de pleno derecho en dos arenas críticas: la bioseguridad global y la propiedad intelectual. Si antes hablábamos de workslop o actores sintéticos, ahora estamos obligados a enfrentar riesgos de escala planetaria y problemas legales que el sistema no está preparado para procesar.
El panorama es fascinante y aterrador a partes iguales: la competencia por la supremacía de la IA ha atomizado el talento de OpenAI, creando nuevas startups que ahora compiten con el gigante que las vio nacer. Pero mientras la tecnología se democratiza y se vuelve más accesible, también lo hace su potencial destructivo. Es la eterna paradoja de la tecnología de frontera: mayor accesibilidad, mayor riesgo.
El diseño de armas biológicas: un estudio de Microsoft
Esta es la noticia que me ha quitado el sueño. Un reciente estudio interno de Microsoft ha encendido las alarmas en bioseguridad: la creación de proteínas con IA abre la puerta al diseño de armas biológicas. Los investigadores usaron IA para diseñar versiones digitales de toxinas como la ricina. El objetivo era poner a prueba los filtros de seguridad de las empresas que sintetizan ADN (que son quienes construyen las proteínas en el mundo real). El resultado es inquietante: los programas de detección fallaron en identificar muchas de las secuencias proteicas peligrosas generadas por la IA.
¿Por qué es crucial? La IA permite que cualquiera con acceso a estos modelos pueda diseñar secuencias biológicas letales sin necesitar un laboratorio de nivel 4. Convierte la biotecnología en una herramienta de software.
El Eslabón Perdido: Si bien la síntesis real de estas toxinas aún requiere hardware físico, el diseño y optimización del arma biológica ahora se ha simplificado y acelerado dramáticamente. La IA ha minimizado el principal cuello de botella: la imaginación y el tiempo de ensayo y error biológico humano.
La tecnología para crear la vida ya está compitiendo contra la tecnología para controlar lo que esa vida puede hacer. La regulación debe actuar ahora, antes de que el prompt se convierta en la nueva arma de destrucción masiva.
Mira Murati Desafía a OpenAI con «Tinker»
En el lado de la innovación y la competencia, tenemos un movimiento clave de la ex-líder de OpenAI, Mira Murati. Su nueva startup, Thinking Machines Lab, cofundada con otros cerebros que abandonaron el laboratorio de Sam Altman, acaba de lanzar su primer producto: Tinker.
Tinker es una herramienta que automatiza la creación de modelos de IA personalizados. En lugar de depender de GPT-4 para todo, Tinker busca que los desarrolladores y las empresas puedan ajustar modelos de código abierto para tareas muy específicas: redactar acuerdos legales, resolver problemas matemáticos o generar respuestas médicas optimizadas.
Murati lo llama la «próxima frontera»: hacer que las capacidades de vanguardia sean mucho más accesibles. Esto no es una competencia por crear el modelo más grande, sino por la personalización y utilidad de nicho.
La Fractura del Talento: Este lanzamiento demuestra que la fuga de talento de OpenAI no es solo una anécdota, sino el nacimiento de una competencia modular que busca capitalizar la necesidad de modelos de IA más enfocados y menos costosos de operar que los gigantes multimodales.
El Desafío del Copyright y el Hardware de OpenAI
Mientras sus ex-colegas se van, Sam Altman tiene sus propios problemas con el éxito viral.
Sora y el Wild West del Copyright: La aplicación de video Sora 2 se disparó al número 1 del App Store, inundada de videos de Pikachu, Mario, Michael Jackson y Bob Ross generados por IA.
OpenAI se vio forzada a implementar controles más estrictos, abandonando el enfoque inicial de «opt-out» para pasar al «opt-in» para los personajes. También anunció planes de reparto de ingresos para los creadores originales. Es un ajuste rápido después de un boom incontrolable, pero subraya que el sistema legal no tiene ni idea de cómo procesar la propiedad intelectual en la era de la generación instantánea de contenido.
El Hardware de Jony Ive, Frenado: El ambicioso proyecto de hardware de IA de OpenAI con Jony Ive (el genio detrás del iPhone) está encontrando problemas de diseño y técnicos, con retrasos que podrían postergar su lanzamiento más allá de 2026. El desafío es existencial: ¿cómo diseñar un dispositivo «always on» y sin pantalla que sea útil sin ser molesto? Además, la infraestructura de cómputo está resultando ser un cuello de botella, ya que OpenAI carece de la vasta capacidad en la nube de Amazon o Google, lo que demuestra que incluso para el líder de la IA, el mundo físico impone límites.
Bits & Bytes: La Competencia se Acelera
Esta es una ráfaga de noticias que ilustra la carrera por la supremacía y la eficiencia:
IA para Ciberseguridad: Anthropic publicó una investigación detallando las capacidades de su modelo Claude 4.5 Sonnet en ciberseguridad, un movimiento clave para asegurar su nicho en el sector empresarial.
DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://es.wired.com/articulos/codigo-futuro-la-ia-es-el-nuevo-disenador-de-armas-biologicas-y-sora-el-caos-del-copyright