LG Smart Monitor Swing: Probamos la pantalla sobre ruedas que cambia de habitación contigo
Las prestaciones
En cuanto a conectividad, el monitor cuenta con tres puertos USB tipo-C (con alimentación de 65W) y dos entradas HDMI. Sin embargo, dado el carácter nómada del Swing, Wi-Fi y Bluetooth incluidos siguen siendo las opciones más populares para reproducir contenidos en cualquier lugar sin el estorbo de los cables y compartirlos desde dispositivos móviles y tablets; también admite screen mirroring. Las imágenes son nítidas, los colores vivos, gracias al brillo de 350 cd/m². También pusimos a prueba este LG con videojuegos y, gracias a una frecuencia de refresco de 60 Hz y un tiempo de respuesta de 5 ms, los resultados fueron buenos. Este era el frente más crítico para el modelo anterior.
La función Auto Pivot ajusta la orientación según el contenido que se esté viendo, así que si quieres cambiar de los videos verticales de TikTok a una película en streaming, no tendrás que levantarte y ajustar el panel, que gira automáticamente. Teniendo en cuenta los diferentes contextos de aplicación de este LG en comparación con los televisores tradicionales, Brightness Control ajusta la iluminación de la pantalla en función de las condiciones de luz ambiental del lugar, e incluye dos altavoces de 10 W en total para adaptarse a la mayoría de las necesidades. La plataforma LG Swing permite el uso de aplicaciones inteligentes tradicionales para la reproducción de películas y series de televisión, en el lado del entretenimiento, mientras que en el lado de la productividad es posible dividir la pantalla en diferentes diseños y conectar un teclado y un mouse.
Conclusiones
«Para muchos, pero no para todos…», LG con Swing consigue definir y mejorar como características un tipo de producto probado hace tiempo. Es poco probable que sea la primera opción para un televisor o una pantalla, pero resulta ser perfecto para una serie de aplicaciones particulares que existen o están por inventar. Las características técnicas son ahora adecuadas, incluso para los compromisos más difíciles y ocasionales, por lo que, dadas las aplicaciones, quizá un precio más asequible podría permitir una mayor difusión. Otro paso adelante podría ser, a igualdad de estabilidad, reducir la huella de la base, encontrando al mismo tiempo una posición de reposo lo más compacta posible, pero protectora, para la pantalla, que abandonada en un rincón durante períodos de no uso podría correr serio riesgo de romperse.
Artículo publicado originalmente en WIRED Italia. Adaptado por Mauricio Serfatty Godoy.
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Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://es.wired.com/review/lg-smart-monitor-swing-probamos-la-pantalla-sobre-ruedas-que-cambia-de-habitacion-contigo
