Probamos el Tecno POVA 7 Pro: ¿Puede un teléfono económico ser gamer?

Calificación WIRED: 8.5/10
Tecno Mobile llegó a Latinoamérica hace apenas cuatro años con una idea en mente: conquistar la gama más asequible del mercado con smartphones atractivos y competitivos. Tras un arribo discreto en el mercado, hoy apuntan con su POVA 7 Pro al sector gamer en Android, un nicho que se caracteriza por ser especialmente crítico con la tecnología.
Concretar esta maniobra de forma satisfactoria no es una tarea sencilla. Deben demostrar la potencia de su terminal ante los principales juegos masivos sin que ello repercuta en una subida de precio o que caiga en problemas inherentes al gaming como la alta temperatura. Tras unas semanas probando el POVA 7 Pro como mi teléfono personal gracias a una unidad proporcionada por la marca, pienso que han superado el reto, aunque con importantes matices.
Un gamer puede jugar razonablemente bien en este teléfono tanto en juegos en solitario como en aquellos de multijugador en línea. Títulos con alta carga de elementos 3D alcanzan entre 40 y 55 FPS (cuadros por segundo) estables con especificaciones medias o altas, mientras que los clásicos battle royal oscilan entre 60 y 90 FPS a máxima resolución. Esta clase de información, así como opciones para modificar el rendimiento de la sesión de juegos, siempre está a la mano, lo que habla bastante bien del software complementario de Tecno.
En su conjunto el POVA 7 Pro es versátil, vistoso, resistente y está lleno de detalles que un entusiasta del gaming sabrá apreciar, aunque en la búsqueda por evitar rebasar el precio de los 5,000 pesos, se hicieron algunos recortes que el público general quizá notará. Por ejemplo, su sistema de cámaras pasa a segundo plano, hay bloatware que no se puede eliminar y gran parte de su IA basada en DeepSeek no está traducida al español.
Hablemos de especificaciones y sorpresas
El motor de este teléfono es un chip Mediatek Dimensity 7300 Ultra y 12 GB de memoria RAM que pueden extenderse a 24 GB de manera virtual desde el almacenamiento interno. Es un microprocesador de gama media-alta diseñado para priorizar la disipación térmica que incluye un apartado gráfico sobresaliente para gráficos en 3D. A modo de referencia, su equivalente es probablemente un Snapdragon 7 Gen 3 que se encuentra en teléfonos más costosos.
También incorpora una batería de 6,000 mAh con carga rápida de 45 W y capacidad de carga inalámbrica. Esta última no suele aparecer en esta gama. Su pantalla es de resolución 1.5 K a 144 Hz. Se ve sorpresivamente bien. Ambos equilibran eficazmente entretenimiento y autonomía. Con un uso moderado, el POVA 7 Pro me duró casi dos días operando. En sesiones de juego, sin problemas sumó hasta ocho horas. El terminal puede parecer grande, pero cuando tomas en cuenta la duración de su batería, todo se compensa.
Me gustó que tiene un sistema de luces LED en la parte posterior que anuncia notificaciones o llamadas, muy en sintonía con lo que Nothing propuso hace unos años. Es personalizable y combina con la estética del teléfono. Además, dentro de la caja viene una batería extra magnética, cargador y funda con imanes. En una época donde ya ni siquiera se encuentran cargadores dentro de los embalajes de teléfonos, este detalle de Tecno es bienvenido.
Los juegos son su prioridad y eso lo hace bien
Probé este teléfono con sesiones de juegos clásicos en la Play Store. En COD: Mobile jugué a 60 FPS a máximas especificaciones, Free Fire alcanzó los 90 FPS a máxima potencia y Fortnite corrió a 60 FPS aunque ya en resoluciones medias. Por su parte, en títulos más complejos como Genshin Impact la tasa de FPS fluctuaba entre los 40 y 50 FPS, aunque siempre en especificaciones altas. Lo importante es que el teléfono es lo suficientemente robusto como para que un jugador pueda elegir entre su configuración favorita: fluidez máxima o gráficos espectaculares.
En sesiones largas no encontré una reducción de rendimiento o aumento significativo de temperatura. Es necesario, sin embargo, que el usuario sea consciente de la gama del teléfono y economice recursos. En otras palabras, hay que intentar que solo se esté ejecutando el juego elegido y no otras apps en segundo plano.
En líneas generales, cumple con el apartado gamer, aunque notamos que le cuesta un poco iniciar los juegos más pesados. Esto se representa en que un usuario podría esperar un poco más para jugar en lo que cargan las texturas o los recursos, pero nada del otro mundo. Cuestión de segundos, aunque es un punto clave de la experiencia y donde se nota también ese recorte de procesador.
En cuanto a las cámaras, como adelantamos, están aquí solo por cumplir. Como habitualmente pasa en los módulos de la gama de entrada, se comportan bien en condiciones de buena luz y se les dificulta capturar información durante la noche o en lugares cerrados. Serán útiles para digitalizar documentos y alguna foto espontánea. Los gamers que tengan en la mira a este teléfono deberán ser conscientes del apartado.
Nuestra conclusión:
Este Tecno Pova 7 Pro supera convincentemente las pruebas de comportamiento en sesiones de juego sobre Android, aunque nunca se debe de perder de vista su precio de menos de 5,000 pesos. Está lejos de ofrecer una experiencia gamer de lujo, pero quizá no es necesario. Su propuesta es sincera y práctica, con detalles por todos lados. Su despliegue técnico es contundente, aunque con ligeros tropiezos. Nos entusiasma y seguramente pondrá nerviosa a su competencia.
Si estás un poco justo de presupuesto, este terminal es una de las mejores opciones en el mercado gamer actualmente.
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