Kindle Scribe 2024: el e-reader con stylus mejora gracias a la IA

El Kindle Scribe 2024 es una versión ligeramente actualizada del Scribe 2022, de hecho el primer lector de libros electrónicos de Amazon compatible con la escritura a mano. Sigue siendo un modelo de 10.2 pulgadas y, netas las mejoras, el Scribe sigue siendo un producto de nicho. Es más, el precio ha subido; parte de 435 dólares para el de 16 GB. Los competidores Remarkable 2 o el Kobo Elipsa se sitúan en cifras similares o ligeramente inferiores.
Hay que tener en cuenta, no obstante, que Kindle Scribe mantiene el panel de tinta electrónica Paperwhite de 10.2 pulgadas, 300 píxeles por pulgada (ppi) de resolución, escala de grises de 16 niveles y sistema de iluminación frontal; como un Kindle Paperwhite más grande, al que obviamente hay que añadir el componente hardware para la fluidez y la escritura.
Kindle Scribe parece una tablet, en la forma
El Scribe se presenta en gris tungsteno o en un vibrante verde metalizado: recuerda a una tablet premium teniendo en cuenta que está fabricado en aluminio y plástico, y tiene unas dimensiones de 196 x 230 x 5.7 mm, así como unos considerables 433 gramos. En línea con el modelo anterior.
El diseño recuerda a la serie iPad de Apple, aunque la pantalla de tinta electrónica tiene un bisel asimétrico para facilitar el agarre. Este último detalle es importante porque la superficie del panel, a diferencia de las tabletas ordinarias, es más sedosa que lisa. En resumen, por un lado no resbala, por otro se puede empezar a adivinar que la experiencia de escritura será diferente de la que ofrecen el iPad y otros modelos. Después, conserva los componentes clásicos de un lector y de hecho soporta Wi-Fi 5, se puede elegir entre versiones de 16, 32 y 64 GB, se recarga a través del puerto USB-C (unas 2.5 horas con una fuente de alimentación de 9W) y promete una autonomía de 12 semanas de lectura y hasta tres semanas de escritura.
En cuanto al bolígrafo (en color), no necesita alimentación ni configuración, y se acopla magnéticamente al lateral del dispositivo. Pesa unos 13 gramos, mientras que el Apple Pencil de segunda generación pesa 16 g y el de primera generación unos buenos 20 g. Es como tener un bolígrafo en la mano, con una hendidura plana en la que se puede apoyar el dedo índice o el pulgar. La punta intercambiable (hay cinco en el paquete) recuerda a la rugosidad del grafito de un lápiz. También cuenta con una «goma de borrar», que en realidad es una tapa a presión para borrar, y un botón lateral con una función personalizable: puedes combinar resaltador, goma de borrar, bolígrafo, nota, etc.
Kindle Scribe para leer
Leer libros electrónicos en un lector de este tipo es obviamente una experiencia más gratificante que en una tableta LCD clásica, aunque solo sea porque no tienes una lámpara disparándote luz a la cara. La tecnología de tinta electrónica ofrece una experiencia similar a la de un libro y gracias a la iluminación (no frontal, sino difusa sobre la superficie), que juega con 24 niveles de intensidad y color, es posible imitar el efecto del papel. Las opciones incluyen un modo automático que varía los dos parámetros en función de la luminosidad ambiente y de la hora del día; incluso se puede fijar una hora para los colores más cálidos.
La peculiaridad del Scribe es que emplea nada menos que 35 LED perimetrales en el marco, frente a los 25 del Oasis y los 17 del Paperwhite; la diferencia se debe a la superficie, claro. En resumen, la lectura es deliciosa, el tamaño de la pantalla agradable, la orientación del texto es automática, pero la usabilidad del Kindle más pequeño sigue siendo superior. Es realmente grande, y luego hay un microdetalle que podría hacer volcar las narices de los puristas: la resolución de 300 ppi es estupenda, pero la renderización en los modelos de menor diagonal es mejor. Es un poco como ver una película de alta resolución en un televisor de 32 pulgadas y luego en uno de 42: el primero tiene ventaja si la distancia es la misma. Es una sutileza, pero se nota. Por supuesto, como siempre es posible ajustar el tamaño de la fuente, el interlineado, la anchura de los márgenes y otros parámetros. Por último, cabe mencionar que soporta los formatos Kindle 8 (AZW3), Kindle (AZW), Txt, Pdf, Mobi desprotegido, Prc de forma nativa; Pdf, Docx, Doc, Html, Epub, Txt, Rtf, Jpeg, Gif, Png y Bmp mediante conversión.
Kindle Scribe para escribir
El capítulo de la escritura es intrigante. En primer lugar, cerrar los ojos y deslizar el bolígrafo por el panel da una sensación de resistencia que recuerda al papel, y luego incluso el ruido es el de un lápiz sobre un bloc de notas. En el iPad, en cambio, todo se desliza con más suavidad, la punta de goma del Pencil se desliza rápidamente y es silenciosa; incluso cuando pones una película, la sensación queda lejos. Mejor que el Scribe solo lo hace la línea Smart de Moleskine, pero ahí sí que escribes sobre papel.
El tiempo de refresco del Kindle, en escritura, es muy bueno e incluso ha mejorado respecto al pasado, independientemente del tamaño del trazo. De hecho, el hardware parece más potente porque la suavidad de las transiciones también es superior. Escribir y también dibujar son experiencias gratificantes. Los niños se vuelven locos dibujando en él porque realmente da la sensación de estar sobre una hoja de papel. ¿Y los profesionales gráficos? Olvídate del Scribe; iPad Air y Pro con Pencil 2 viajan en otra dimensión: no olvides que el sistema de Apple también lee la presión táctil.
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