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Sam Altman escribe a sus trabajadores para rechazar la oferta de Musk de comprar OpenAI

Sam Altman no deja lugar a dudas sobre su posición acerca de la oferta de Elon Musk para concentrar el poder de OpenAI. En una carta al personal de la compañía, el CEO puso las palabras «oferta» y «acuerdo» entre comillas y dijo que el consejo no tiene ningún interés.

«Nuestra estructura existe para asegurar que ningún individuo pueda tomar el control absoluto de OpenAI», escribió Altman, según dos fuentes con conocimiento de la carta. «Elon Musk dirige una empresa de IA competitiva, y sus acciones no tienen que ver con la misión o los valores de esta compañía».


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No hay una oferta explícita

Altman también ha dicho a los empleados que la junta de OpenAI, aún no ha recibido una oferta oficial de Musk y los otros inversionistas. Si esto ocurre, el consejo planea rechazar la oferta, indican esas mismas fuentes. Internamente, los empleados de OpenAI reaccionaron a la noticia con una mezcla de temor y exasperación. The Information publicó partes de la carta de Altman.

A inicios de la semana, un grupo de inversionistas liderado por Musk sorprendió a la industria tecnológica al anunciar una oferta no solicitada para comprar todos los activos de OpenAI por un valor de 97,400 millones de dólares. La empresa competidora de Musk, xAI, respalda la oferta, al igual que Valor Equity Partners, una firma de capital privado dirigida por uno de los asesores más cercanos de Musk, Antonio Gracias. Gracias ayudó a asesorar a Musk en su acuerdo para adquirir Twitter en 2022 y ha estado involucrado en sus esfuerzos en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE).

«Es hora de que OpenAI vuelva a ser la fuerza del bien de código abierto y centrada en la seguridad que una vez fue. Nos aseguraremos de que eso ocurra», redactó Musk en un comunicado enviado a WIRED a través de su abogado Marc Toberoff.

Musk ha demandado a OpenAI en múltiples ocasiones por violar supuestamente «sus compromisos originales» como organización sin fines de lucro al pasar a convertirse en una empresa comercial. Además de contraatacar en los tribunales, OpenAI publicó una serie de correos electrónicos en los que afirmaba que Musk sabía que OpenAI necesitaría convertirse en una empresa con fines de lucro para poder dedicarse a la inteligencia artificial general y, de hecho, intentó fusionar la empresa con Tesla.

La pelea entre ambos magnates pone en el punto de mira al presidente del consejo de OpenAI, Bret Taylor, que también dirigió el consejo de administración de Twitter durante la adquisición de la empresa por parte de Elon Musk. Aquella oferta era, en teoría, más sencilla; como Twitter era una empresa pública, el consejo tenía la clara obligación fiduciaria de maximizar los beneficios. Musk intentó echarse atrás en la adquisición, pero sus asesores acabaron convenciéndole de que no iba a ser posible y cerró la operación en los términos originales. Taylor no respondió a la solicitud de comentarios de WIRED.


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OpenAI es más complicada que X

Hoy en día, la empresa es una organización sin fines lucro con una filial comercial, pero está en proceso de convertir la rama con fines de lucro en una corporación de beneficio público, lo que requiere que OpenAI ponga precio a sus activos. OpenAI está valorada actualmente en 157,000 millones de dólares, según su última ronda de financiamiento. La compañía está en conversaciones con SoftBank para liderar una inversión de 40,000 millones de dólares, lo que elevaría la valoración de la empresa a 300,000 millones de dólares.

Aunque la junta de la organización sin fines de lucro no tiene la responsabilidad fiduciaria de maximizar los beneficios para los inversionistas, sí tiene el deber de negociar una valoración razonable de los activos de OpenAI para perseguir los objetivos sin fines de lucro de la empresa. «Si el consejo aceptara una oferta inferior de Altman o de una empresa controlada por él, estaría incumpliendo su deber fiduciario, ya que Altman es considerado una persona con información privilegiada», argumenta Samuel D. Brunson, profesor de Derecho de la Universidad Loyola de Chicago, especializado en organizaciones sin fines de lucro. OpenAI no respondió a la solicitud de comentarios de WIRED.

«La oferta de Elon establece un suelo para el valor de esos activos. Como mínimo, hace que sea mucho más complicado para OpenAI dividir los activos en una organización con fines de lucro controlada por Sam Altman», expresa Brunson. No obstante, añade que la junta probablemente tendrá en cuenta la probabilidad de que Musk realmente siga adelante con la oferta: «Basándose en su adquisición de Twitter, donde tuvo que ser obligado a aportar el dinero que ofreció, puede haber escepticismo de que haga lo que dice».

Las fuentes consultadas por WIRED refieren que Altman se nota escéptico, recordando a sus allegados que Musk tiene «un amplio historial de exageraciones». En una entrevista con Bloomberg, Altman reiteró algunas de esas afirmaciones: «Elon intenta todo tipo de cosas durante mucho tiempo. Probablemente solo intenta retrasarnos». En cuanto a X, Altman lo expresó de forma más contundente: «No, gracias, aunque podemos comprar Twitter por 9,740 millones de dólares si quieres» [El 10% de la oferta de Musk por OpenAI]. Musk respondió con una sola palabra: «Estafador».

Artículo originalmente publicado en WIRED. Adaptado por Alondra Flores.

DERECHOS DE AUTOR
Esta información pertenece a su autor original y fue recopilada del sitio https://es.wired.com/articulos/sam-altman-escribe-a-sus-trabajadores-para-rechazar-la-oferta-de-musk-de-comprar-openai

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